¡Ni un kilo de más estas fiestas navideñas!
La solución no está en obsesionarse ni en dejar de lado las comidas tradicionales de las navidades, con la familia y amigos, ya que existen una serie de soluciones y consejos muy afectivos para mantener nuestro peso durante este período. Bastará con introducir unos pequeños cambios a la hora de sentarse a la mesa y controlar ciertos alimentos para disfrutar de una buena comida con los seres más queridos.
No tenemos que temer a las celebraciones próximas, ni tampoco saltarnos comidas antes o después de ingestas interminables. La solución está en ser selectivos con qué y cuánto comemos, así, incluso el turrón sabrá mejor.
La navidad suele alterar nuestras rutinas alimenticias, porque es época de degustar platos tradicionales que solo nos permitimos en estos días. Aunque los tiempos cambian, la herencia culinaria cuenta con muchos adeptos, principalmente en fechas que invitan al acercamiento con la familia y las costumbres de cada lugar. En consecuencia, lo más habitual es que nos ofrezcan platos que ha preparado con dedicación algún familiar o un amigo, en incluso nosotros mismos, y que no podemos rehusar sin más.
No obstante, endocrinólogos y sociólogos señalan que, desde que los comercios empezaron a adelantar las ofertas de los productos para estas fiestas, solemos también, consumirlos no como ocurría antiguamente durante una semana sino que ahora ese consumo se realiza desde un mes antes. Así, podemos llegar a ganar del orden de dos a cuatro kilos.
Además, los numerosos aperitivos, el consumo de alcohol, la mezcla de platos con alto contenido en nutrientes variados, sobre todo, hidratos de carbono y proteínas, pueden provocar empachos y molestias.
En realidad, estos rasgos de sufrimiento son innecesarios. Si seleccionamos bien los alimentos y hacemos discriminaciones en el menú. Si escuchamos a nuestro cuerpo y aceptamos que tiene un límite; si compensamos días y noches sentados a la mesa con una buena caminata, la fiesta será una diversión saludable.
Los días rojos del calendario, aquellos en los que es inevitable enfrentarse a una mesa repleta de manjares, compensa las otras comidas de esa fecha para que sean lo más ligeras posibles. Por ejemplo, si vas a celebrar la Nochebuena procura que tanto el desayuno como el almuerzo sean poco energéticos. El día de Navidad, intenta tomar un desayuno y una cena lo más ligeros posibles, que compensen los excesos del mediodía.
EN LOS PROXIMOS DÍAS SUBIREMOS: Normas sencillas de seguir, para que no cojas más kilos estas navidades.