Consejos para mantener el peso en las vacaciones

 Las vacaciones son para descansar, o cansarse haciendo otras actividades propias de vacaciones,  desconectar del ritmo de trabajo, más o menos frenético que llevamos durante el año, dormir, comer, disfrutar de la familia amigos….

Al final, lo más probable es que nos quedemos con 2 o 3 kg de más, que arrastraremos, con la intención de bajarlos hasta navidades, donde se sumarán algún otro kilito…

Esta es la versión exagerada de la historia, ni a todo el mundo le pasa eso, ni nos tiene porqué pasar.

Se trata de disfrutar de nuestro merecido premio, sin agobiarnos en exceso por lo que comemos, ni tampoco abandonando del todo cualquier abismo de pauta saludable.

Os proponemos, algunos truquillos, consejillos… como queráis etiquetarlos, para que, con facilidad, disfrutéis de unas vacaciones sintiéndoos ligeros y saludables

 -         Mantener un horario regular en las comidas (4-5 al día), No saltarse ninguna y evitar comer-picar entre horas. Está claro que esto hay que adaptarlo a cada uno, y al ritmo que lleva en vacaciones. Lo importante es repartir la comida a lo largo del día, y no concentrarla en uno o dos momentos.

Una ventaja inmediata de esto, es que tras una comida muy copiosa, puede aparecer la temible tripa hinchada, y las digestiones pesadas. Con el calor del verano y la ropa mas ligera esto se lleva peor

-         Toma el aperitivo. ¡Es lo mejor del verano! mejillones al vapor, berberechos al natural, sepia a la plancha, gambas y langostinos a la plancha, pulpo pepinillos en vinagre, verduras a la plancha… hay muchas posibilidades poco calóricas y saludables. Si has estado de tapas, compensa en la próxima comida y hazla mas ligera

-         Beber de un litro y medio a dos litros de agua al día, para asegurar una hidratación suficiente y tener sensación de plenitud gástrica. Utilizar infusiones frías, refrescos light, .zumos, granizados… lo mejor es que sean sin gas.

-         El alcohol mezclado con el sol no es una combinación muy buena. Siempre con moderación

-          Si te pasas un día, compénsalo al día siguiente con una dieta mas ligera

-         Si te apetecen helados o batidos u otro postre propio de la temporada, sustitúyelo por batidos con fruta natural triturada y leche desnatada. Puedes tomarlo frescos y no te sumaran tantas calorías.

-         Las cocciones más adecuadas son, plancha, brasa, parrilla, microondas, vapor, horno, hervidos, estofados, en su jugo o papillote. Limitar las frituras y comidas grasientas. ¡Que juego dan las barbacoas veraniegas!

-         No olvidar tomar la fruta entre comidas: las frutas de temporada son muy frescas, dulces, con mucho agua en su composición que nos hidratan… Un recipiente de fruta cortada para una mañana de playa es estupendo, además si eliges las que tienen mas vitaminas, te ayudan a proteger la piel, y lucir un bronceado mas bonito.

-         Sustituir el azúcar por edulcorante.

-         Masticar bien los alimentos y comer lentamente. Favorece las digestiones, (evita gases y vientre hinchado), ayuda a saciarte antes con menos comida.

-         Realizar ejercicio físico regularmente o andar. Las vacaciones son excepcionales para emprender multitud de actividades al aire libre, natación, senderismo, bicicleta…

-         Cuando vayamos a hacer la compra, ir sin apetito, hacer previamente una lista y pensar en disfrutar de la comida de manera saludable sin sobrecargar en calorías

 Para comer fuera de casa en verano

-         No llegar hambriento al restaurante. Para esto es necesario respetar la fruta de media mañana y media tarde.

-         No comer con los ojos y consultar al camarero ya que muchas veces no sólo sirven lo que aparece en el menú. Hay platos que pueden hacerse a la plancha y en esta época del año siempre hay opciones ligeras con ensaladas, gazpacho y frutas de temporada

-         Mientras se espera la comida se puede beber agua, zumo de tomate gazpacho… nos reducirá el hambre.

-         Pedir primero , así no surge la tentación de pedir platos de los acompañantes que tengan calorías innecesarias

-         Elegir bien, rechazar fritos , rebozados, guisos, gratinados o empanadas y optar por platos a la plancha, parrilla vapor  o en su propio jugo

-         Reducir el menú. En vez de pedirlo completo es mejor elegir un segundo y acompañarlo simplemente con ensalada. También se pueden compartir platos con los acompañantes para que las cantidades no sean excesivas.

-         La opción de pedir entre varios “para picar”, está bien si se pide con moderación las raciones necesarias, e incluyen platos de variados.

-         Pedir al camarero que retire el plato en cuanto se sienta saciedad. De esta manera no se cae en la tentación de seguir picando las sobras hasta que los demás acaben.